Ágata Árbol: Piedra de enraizamiento y crecimiento. Fomenta la paciencia, la conexión con la naturaleza y la seguridad interior. Ideal para quienes están en procesos de cambio o desean fortalecer sus raíces.
Turquesa Africana: Considerada la “piedra de la evolución”. Activa el cambio positivo, ayuda a abrirse al crecimiento espiritual y aporta equilibrio emocional. Su tono verde-azulado conecta con el corazón y la verdad interior.
Pirita: Cristal de abundancia, protección y energía vital. Repele energías densas, potencia la autoconfianza y actúa como imán para las oportunidades. Un verdadero catalizador del merecimiento y la prosperidad.
Este colgante es perfecto para quienes buscan avanzar con firmeza, proteger su energía y abrirse al nuevo ciclo con fuerza y propósito.
Las bolitas son de 6 mm